"MEMORIA".

"BREVIRRELATO".

    Mis recuerdos más los recuerdos de los que estaban conmigo en las vivencias que evocan esos recuerdos. Formamos memoria sumando a la memoria individual la memoria colectiva. Guardamos recuerdos y reconocemos los olvidos cuando los demás comparten sus recuerdos. Ellos a su vez son conscientes de sus olvidos cuando les contamos nuestros recuerdos. Es un juego de memorias que acaban componiendo una memoria única que todos compartimos.

    La memoria es caprichosa y extrañamente selectiva. Elige de manera misteriosa lo que quiere recordar y relega al olvido de forma inexplicable una buena parte de nuestra verdad. Es en nuestra relación con los demás, con las personas que nos acompañaron en el pasado, cuando conseguimos completar la verdadera historia de nuestras vidas. La soledad es una visión incompleta de nuestra existencia. La convivencia, la amistad, la vida compartida, nos ayudan a entender mejor nuestra historia personal. Alguien que te ayude a recordar es alguien que merece la pena que tengas a tu lado. Olvidar es dejar de tener y en la mochila de la vida tienen que pesar más los recuerdos que los olvidos. Recordar nos hace más sabios y llena de significado nuestras vidas. La ignorancia es compañera del olvido.

 Hay una parte de nuestros recuerdos que manejamos a voluntad y otra parte que se rige por reglas que desconocemos, recuerdos que aparecen y desaparecen, que se van y que vuelven de manera misteriosa. Recuerdos sobre los que no tenemos control y que campan a sus anchas en nuestras mentes. Es un baile extraño de idas y venidas, de presencias y ausencias, de detalles y olvidos.

    Las leyes de la memoria no están escritas. Nadie las conoce ni las domina, no hay expertos ni entendidos. La memoria es un ente singular y poderoso que como un dios incomprensible reparte, quita y nos devuelve. Es ese número de magia que a la vez que nos asombra, nos alegra y entristece. Larga vida, larga memoria.

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( Lucién Bosán ).


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