"LA ELECCIÓN".


"BREVIRRELATO".

    Su madre le insistía :

    - Tienes que aceptarlo hija y dejar correr el asunto. No te des mal, los hombres son así, no merece la pena que te disgustes - .

    Siempre igual pensaba. Una está condenada a sufrir en soledad. Mujeres como mi madre han vivido sus vidas sometidas, aceptando todo tipo de desprecios y soportando el enorme dolor del maltrato a escondidas, en la más cruel soledad. Los tiempos han cambiado y no tengo por qué soportar humillaciones que no merezco. Ahora soy mujer. Podría ser hombre pero no lo soy. Puedo sufrir y puedo hacer el mismo daño que recibo. La tan manida igualdad no supone estar en las mismas condiciones para provocar el mismo sufrimiento que en un momento dado una padece. Se trata de ser consciente de que a pesar de estar expuesta a ser herida por quien menos imaginas, una es libre para enfrentarse a ello y romper con el lazo que te une a un destino equivocado.

    -Lo siento madre, soy yo la que quiero que no te disgustes. Merece la pena no aceptar lo que no es justo. Los hombres son así como tú dices. Las mujeres tenemos ahora la libertad de no serlo. Podemos ser iguales y podemos también no serlo. Lo tengo claro madre, ya he elegido. Lo abandono. No me mires así, ven aquí, abrázame y dame un beso.

***

( Lucién Bosán ).


******

Comentarios

Entradas populares