"MENOS ES MÁS".

"BREVIRRELATO".

    “Eso es que sobra algo; siempre sobran palabras, siempre menos es más”.

    ( Ana María Matute ).

    Nos vence el empeño en hablar más de la cuenta, en decir cuanto más mejor. Sólo conseguimos que nos sobre algo. La mayoría de discursos y de opiniones están repletas de palabrería. Poco contenido y mucho fuego de artificio. Abuso de frases grandilocuentes y escaso pensamiento de peso. Hablar por hablar y decir lo mínimo. Hay un exceso de expresión y a la vez una profunda falta de actuación. Existen conceptos que necesitan de muy poco para ser transmitidos. A veces con muy pocas palabras se dice mucho y en otras ocasiones basta con una mirada, con un gesto, con una caricia, un apretón de manos o un abrazo, para decirlo todo. Los mensajes importantes nos llegan pobres de vestiduras y sin necesidad de grandes decorados. 

    Hay grandes sentimientos, vivencias y experiencias que precisan de muy poco para ser disfrutadas. La verborrea cansa y no consigue sino dispersar la atención y al final no hay comunicación porque el continente devora al contenido. Dice el viejo Lucién en unos de sus levigramas: “Dime lo menos posible para que me resulte más fácil distinguir la verdad”. Si la mentira necesita de abundancia de palabras, la verdad requiere de muy pocas para encontrar el lugar que le corresponde.

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( Lucién Bosán ).


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